Descripción enviada por el equipo del proyecto. El solar está ubicado en la intersección de dos importantes vías del noreste de Madrid, un lugar idóneo para que nuestro cliente pusiese sus oficinas centrales.
El edificio debía ser singular y con el carácter suficiente para representar a la empresa.
La dificultad residía en la forma triangular de la parcela y en el desnivel existente entre las dos calles. Los retranqueos perimetrales obligaban a una crujía muy estrecha y a una distribución de circulaciones muy complicada. A esto se une una edificabilidad muy baja comparada con el volumen máximo permitido.
Con estas premisas planteamos el proyecto como un buque con tres proas, de manera que cada esquina del mismo funcionase como un elemento claramente identificativo. De manera que tenemos la fachada en el cruce de calles, que es la más sobria y regular; la esquina de que da a la parcela colindante por la calle superior, con la escalera volada como protagonista; y la esquina en la calle inferior, que es el más irregular, con los vuelos de terrazas y el desembarco de la escalera.
Optamos por situar la escalera en el exterior e introducir quiebros que generen terrazas que van escalonando el volumen en los laterales de la parcela, permitiendo, a su vez, la apertura de huecos orientados a la luz y la panorámica. La resolución de unos forjados tan irregulares se produce a través de estructura reticulada de hormigón armado.
El edificio resulta de la extracción de piezas al sólido capaz de manera que la caras que quedan en el exterior del volumen están acabadas con paneles composite y las caras 'seccionadas' se revisten con chapa plegada, apareciendo algunos paños en color naranja para acentuar los huecos.
En alguna de las terrazas inferiores se dispone una estructura que queda como reminiscencia del volumen sustraído.
La escalera actúa como elemento estructural ya que la barandilla es una cercha que sirve de soporte al edificio.